Conquistador mongol-turcomano
- Casa Real: Dinastía Timúrida
- Reinado: 1370-1405
- Nombre: Timur
Timur, llamado Tamerlán, quien habría de crear un imperio en Asia central y occidental y hacer temblar al Imperio Romano de Oriente, nació el 8 de abril de 1336 en una aldea cerca de Kech, que actualmente es Shakhrisyabz, en Uzbekistán.
Fue hijo de Taragai, jefe de la tribu tártara de los barlas y perteneciente a la nobleza turca que estaba al servicio de los khanatos mongoles.
A los 16 años de edad entró al servicio del emir Qazgan, que gobernaba la Transoxiana (actual Uzbekistán), quien le dio su hija Aldjai como esposa.
Su suegro fue asesinado, y tras matar a los asesinos Timur regresó a Kech. Al morir su padre el gobierno de los barlas fue tomado por su tío Hadji, mientras el khan Tugluk Temur, emperador de los mongoles, intervenía para restablecer su control en la Transoxiana.
Para recompensar la venganza de la muerte de Qazgan, Tughlug Temur nombró a Timur regente de este territorio en 1360. Sin embargo, ese mismo año se rebeló contra el hijo del khan, que actuaba como virrey, lo que provocó una nueva intervención de Tugluk Temur.
Timur escapó con su esposa y reunió a su alrededor un pequeño ejército de rebeldes, organizando revueltas y escaramuzas. En una de ellas fue herido en la pierna y el brazo derecho. Perdió el uso del brazo y quedó cojo, por lo que fue llamado Timur el Cojo, en persa Timur-i-Leng, nombre que fue adaptado en Europa como Tamerlán.
Después de varias victorias y derrotas, y tras la muerte de Tugluk Temur, Tamerlán derrotó en 1363 al hijo del khan, Ilyas Khodja, cerca de Samarcanda. Esta victoria debilitó considerablemente el poder mongol en la zona. El ejército de Tamerlán, formado principalmente por turcos, aumentó al unírsele los miembros de varias tribus mongolas tras la fragmentación del Imperio en varios feudos.
De esta manera logró derrotar los debilitados ejércitos del khan y nombrarse rey de la Transoxiana en 1369, rechazando la autoridad mongola y estableciendo su capital en Samarcanda. Declaró la restauración del imperio de Gengis Khan, de quien se proclamó descendiente.
Desde su nueva posición de poder Tamerlán logró someter los reinos vecinos, antiguos vasallos del khan. Instauró entonces una política militar, invadiendo muchos reinos y territorios. Entre 1379 y 1387 sometió la Persia oriental, derrotando al rey de Ispahán y donde se dice que mandó matar a más de 70.000 personas. Saqueó Azerbaiyán, Georgia, Armenia y Mesopotamia septentrional, donde la ciudad de Bagdad se entregó sin resistencia. Regresó luego a la Transoxiana, donde aplastó una insurrección en su contra.
En 1392 y 1393, invadió nuevamente Persia y Mesopotamia, hizo asesinar brutalmente a los habitantes de Bagdad y llegó hasta Siria, donde arrasó Alepo y Damasco, que eran gobernadas por el sultán mameluco de Egipto. En 1398 decidió conquistar la India, donde sus ejércitos saquearon la ciudad de Delhi. Tamerlán llegó hasta el Ganges, antes de regresar a la Transoxiana.
En 1402 se dirigió al Asia Menor, conquistando muchos territorios otomanos y derrotando al sultán Bayaceto.
Saqueó Brusa, conquistando Esmirna, que estaba en poder de la Orden de los Caballeros Hospitalarios, y recibió el vasallaje del emperador Manuel II Paleólogo y de los genoveses de Focea, Quíos y Lesbos, restableciendo en cada uno de sus dominios a los emires que habían sido desposeídos por los otomanos. En este tiempo recibió embajadas de rey Enrique III de Castilla y de Carlos VI de Francia, para mantener relaciones comerciales. En parte por medio de estos contactos y por la lucha contra las fuerzas de Bayaceto, el imperio bizantino logró escapar a un ataque directo por parte de Tamerlán.
El 18 de febrero de 1405, cuando preparaba una campaña para conquistar China, Tamerlán murió en la ciudad de Otrar.
Su cuerpo fue trasladado a Samarcanda, y su imperio, al que no había dado unidad, se desintegró tras su muerte. Sus guerras habían llevado la ruina al Medio Oriente y el Asia central, y significaron un desastre para la cultura musulmana y para los cristianos de oriente.
Tras varias luchas entre sus familiares, su hijo Chah Rock fue nombrado su sucesor, e intentó reparar los daños producidos por Tamerlán, gobernando en relativa paz los restos de su Imperio.
