Claudio I, emperador romano, murió envenenado con setas venenosas por su esposa Agripina con el fin de que su hijo Nerón ocupase el trono (posteriormente Nerón haría matar a su madre). Su médico personal, Xenofón, trató de provocarle el vómito introduciéndole una pluma en la garganta. También se ha sostenido que la pluma estaba envenenada.
© buscabiografias, 1999-2024